Sin Mucha Alegría

​Lamentablemente, de los cincuenta tres años de vida que he completado hasta el momento, sólo dieciocho de ellos han sido totalmente 'feliz'. Cuento mis primeros diecisiete años de vida que crece en Irán como el mejor, seguido por el primer año de vida de mi hijo cuando me quedé en casa con él y completamente me sumergí en mi nuevo papel como madre y pasé cada minuto del día con mi dulce y perfecto hijo, sin ninguna distracción y un solo pensamiento negativo.

El resto de mi vida nunca ha estado cerca de aquellos dieciocho años para que varias razones, pero principalmente porque de no sentirse bien amado y apreciado por mi cónyuge. Y ahora, quince meses después de perder a mi hermosa hija inteligente, siento que no hay ningún punto en el que viven más. 

Si no fuera por mi hijo, yo no me hubiera importado si me gustaria desaparecer de un día. Yo todavía soy la madre de un joven hombre y deseo de contribuir sólo felicidad a su vida, no temor, tristeza y más remordimientos. Él merece tener padres fuertes, sano y de apoyo. No quiero ser una carga en su vida con mis sentimientos de infelicidad. Él ya ha tenido la gran tragedia de perder a su única hermana y no merece ser agobiados por otros acontecimientos tristes. Todavía necesita nuestra ayuda para encontrar su camino a la alegría y la felicidad. Por lo tanto, tengo que estar fuerte para él durante todo el tiempo que pueda, mientras me extraño mucho mi perdida hija.​